Lugares en los que habitan los genios
Los genios viven en la misma Tierra que los humanos y también viven en comunidad. La mayoría de ellos puede encontrarse en áreas donde existen ruinas. También suelen habitar en lugares donde hay suciedad, como baños, cubos de basura, corrales de camellos y cementerios. Por esta razón, existen Hadiz que prohíben orar en los baños y en los cementerios. Hay genios que habitan en lugares donde pueden difundir el mal y la corrupción. Además, los genios habitan las mismas casas en que las personas viven. Pero se los puede detener o rechazar mencionando el nombre de Al-lah al entrar en la casa, recordando constantemente a Al-lah (Dhikr) o recitando el Corán.
Él Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, mencionó que los genios se extienden y aumentan con la noche y la oscuridad, y que les gusta sentarse entre las sombras, cuando la luz del sol está desapareciendo.
Comida y bebida de los genios
Los genios comen y beben. Satanás come con la mano izquierda, y los genios que no creen en Al-lah buscan toda comida sobre la que no haya sido mencionado el nombre de Al-lah. Por eso, siempre debemos mencionar el nombre de Al-lah antes de comer o beber. También se menciona que los embriagantes son las bebidas de los demonios.
Matrimonio y procreación de los genios
Los genios pueden casarse y procrearse. Al-lah Dice en el Corán (lo que se interpreta en español) que los genios tienen descendencia, y advierte a las personas que se alían con ellos: {¿Acaso tomáis a Satanás y a sus descendientes como protectores en vez de tomarme a Mí, a pesar de que son vuestros enemigos?} (Corán 18: 50)
Los genios tienen intelecto y libre albedrío
Al igual que los humanos, los genios tienen la capacidad de pensar, razonar y elegir entre el buen y el mal camino. Por lo tanto, son responsables de sus acciones y tienen ciertas obligaciones y prohibiciones. Al-lah se complacerá con los que sean obedientes y los dejará entrar en el Paraíso. Pero los que sean rebeldes y desobedientes, entrarán en el fuego del Infierno. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Les dirá [Al-lah]: Éntrad al Infierno junto a los incrédulos que os precedieron, de entres los hombres y los genios...} (Corán 7: 38)
Genios incrédulos y genios creyentes
Así como hay genios malvados e incrédulos, también existen genios buenos y creyentes. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Diles [a los hombres ¡Oh, Muhammad!]: Me ha sido revelado que un grupo de genios dijeron al escuchar [la recitación del Corán]: Por cierto que hemos oído una recitación maravillosa que guía al sendero recto. Creemos en él [el Corán] y no asociaremos coparticipes a nuestro Señor.} (Corán 72:1-2)
No obstante, todos los genios tienen estrictamente prohibido el hacer contacto con los humanos. De igual manera, a los humanos les está prohibido contactarse con los genios, pues esto es un pecado muy grave, similar a la idolatría.
Los genios malvados son los demonios (Shaiatin)
Se denominan demonios a los genios que son desobedientes e incrédulos.
Él demonio, que es mencionado muchas veces en el Corán (Satanás), era uno de los genios que rendía culto a Al-lah en el principio de la creación. Habitaba en los cielos junto a los ángeles. Éntró al Paraíso, pero desobedeció a su Señor cuando se negó a postrarse ante Adam (Adán), la paz sea con él, por orgullo, arrogancia y envidia. Por esto, Al-lah lo expulsó de Su Misericordia y lo llamó Iblís, que significa “privado de toda bondad”.
Los demonios huyen al oír la llamada a la oración (Adhan), y durante el mes de Ramadhan son encadenados.
La enemistad entre los humanos y el demonio
La enemistad entre el hombre e Iblís se remonta a principios de la historia de la humanidad, cuando Al-lah creó a Adam, la paz sea con él. Cuando Al-lah insufló en Adam su espíritu, pidió a los ángeles que se postrasen ante él. Iblís, que adoraba hasta entonces a Al-lah junto a los ángeles, fue incluido en la orden. Pero éste se consideró a sí mismo superior, y por orgullo se negó a postrarse ante Adam. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Al-Lah le preguntó: ¿Qué te impidió hacer la reverencia cuando te lo ordené? Respondió: Yo soy mejor que él, pues a mí me creaste de fuego y a él de barro.} (Corán 7: 12)
Iblís fue expulsado del Paraíso debido a su orgullo y arrogancia, pero Al-lah le prometió que permanecería vivo hasta el Día del Juicio Final. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Dijo [Iblis]: Permíteme vivir hasta el Día de la Resurrección. Dijo [Al-lah]: Te concedo la prórroga que me pides, porque He decretado probar a los hombres con tu seducción.} (Corán 7: 14-15)
Éntonces, Iblís hizo la promesa de que desencaminaría a la descendencia de Adam: {Dijo [Iblis, al ver que había quedado completamente fuera de la Misericordia de Al-lah]: Por haberme descarriado acecharé a los hombres para apartarlos de Tu sendero recto. Procuraré seducirles por delante, por detrás, por la derecha y por la izquierda; y verás que la mayoría de ellos no son agradecidos.} (Corán 7: 16-17)
És así como el demonio se declara abiertamente enemigo de la humanidad, promete esforzarse para descarriar a la descendencia de Adam y hacer todo lo que pueda contra ellos, atacándolos desde toda dirección posible. Dice Al-lah (lo que se interpreta en español): {Ciertamente Satanás es para vosotros un enemigo, tomadlo pues, como enemigo...} (Corán 35: 6)
Fuente: islamweb.net